sábado, 10 de septiembre de 2016

Intento continuamente ocultar lo que siento. ¿Por qué? No sabría dar una respuesta exacta, tal vez sea porque me considero muy joven como para aferrarme a algo que tarde o temprano acabará desapareciendo. Tal vez sea porque considero que he sufrido lo suficiente como para tomarme un tiempo yo sola, sin nadie que revolucione mis hormonas, pero de esta forma lo único que consigo es engañarme a mi misma, yeso es un  error demasiado grave como para pasarlo por alto. Intento engañar a los demás, y lo logro, aunque en el camino me encuentro a mi peor rival, mi mente. Esa que intenta aparcar mis problemas y hacer de todos los problemas la mínima aprte, pero ya no puedo más. Creo que ya es hora de que sea yo misma la que tome las riendas de mi vida, me suelte un poco la melena y deje de pensar tanto sobre si lo que hago esta bien o esta mal. Tan solo dejarme llevar por mis instintos, aunque mi parte racional, por supuesto siga tomando cartas en el asunto.

Empiezo una época en mi vida que espero sea bonita, porque importante ya lo es, desde luego. Empiezo la universidad. Empiezo la carrera de Derecho. Empiezo una época que pensaba que nunca llegaría, y aquí estoy, a días de comenzar la universisad , de cambiar de aires, de dejar atrás esos malos rollos que tenía anteriormente, espero hacer de esta época una de las mejores, y creo que ocultando mis emociones no podré conseguir que sea así. Es momento de convertirse en la verdadera persona que soy, llegó el momento de ser natural, de ser yo misma, de presentarme a gente y que sepan de primeras que soy una chica que vale la pena conocer y entablar una amistad, y ¿por qué no? Una chica de la que vale la pena enamorarse.